Universidad Veritas
Escuela de Arquitectura
Teoria 3
II cuatrimestre 2011
Ensayo #2
Critica a la imagen
Rosaura Montoya Castillo
Arq. Carlos Mata
26 julio
La publicidad es un método de estetización creado por la misma sociedad que ha sido en parte anestesiada de todo lo que ven a su alrededor. La sociedad actual es una sociedad de información formada por la inundación de imágenes en donde la condición actual se describe como éxtasis de la comunicación. Según el teórico francés Jean Baudrillard vivimos en un mundo donde cada vez hay más información y menos significado.
Comúnmente estamos saturados de mucha información debido a la tecnología así como la televisión, las revistas, la radio, las vallas publicitarias el internet, que es el medio que más satura nuestra mente. Toda esta tecnología nos llena de imágenes más que todo estereotipadas de nuestro modelo de vida, como debemos de vernos por ejemplo, medir tal talla, tener tales lentes de sol o vestuario, tal casa. Sintetizando, con la publicidad se vende un modo de vida a seguir, que es estatizado siendo así que le hace ver a la persona una única forma de vida a seguir para ser parte de un mundo en el que la belleza, estética han perdido significado y se vuelven objeto principal de la publicidad dándole a las personas una vista ciega de lo que ven en su entorno.
La estética es un criterio, una percepción o apreciación de la belleza cuya finalidad es llamar la atención de la gente con un sentido artístico. La belleza es un conjunto de cualidades de las cosas o de las personas, cuya manifestación sensible produce placer, deleite o admiración.
Esos dos conceptos han sido separados de su original significado y cambiados al ser utilizados junto con el arte como instrumento económico. Las artes plásticas han sido manipuladas por la publicidad a través del tiempo cuyas características estéticas tienen que ver con los efectos sobre los gustos que tiene la sociedad. Pero siendo el arte una forma de reproducir cosas, construir formas o expresar una experiencia y que pueda emocionar o producir un choque, la publicidad junto con el arte trata de representar la realidad que envuelve a un cierto producto y reproduce las condiciones de consumo y los beneficios que aporta. Al utilizar el arte en las vallas publicitarias se busca impactar al lector llamándole la atención en los escasos segundos que dispone para deleitarles la vista, emocionándolos o produciéndoles un choque visual que altera la sensibilidad y los estímulos.
El problema con las imágenes es que esconden los aspectos reales de la vida nos muestran una idea de mundo hiperreal con un estilo de engaño sobre la realidad en que vivimos. La gente se deja llevar por lo que ven por la belleza de lo estético y no por su función. Es algo muy superficial. En las ciudad de Las Vegas, por ejemplo, todo lo que se ve es una reutilización del arte antiguo que tiene gran valor cultural pero ha sido materializado para comercializar y atraer. La falsa torre Eiffel , las pirámides comercializadas de Egipto, la valla publicitaria de la Antigua Grecia, todo eso es pura atracción de juego que ha sido reutilizado de su original significado. La sociedad moderna es un espectáculo, las personas modernas son espectadores, observadores seducidos por las presentaciones glamurosas de sus propias vidas. Hay una obsesión por la imagen que influye mucho en nuestra manera de pensar y no nos deja tener conciencia propia y crítica. La publicidad les vende una forma de pensar y sus propios deseos.
Ahora todo gira alrededor de la estética, esta maneja todo lo que realizamos y hasta en nuestras vidas cotidianas. Las apariencias no deberían ser nuestras guías sino el significado verdadero de lo que nos rodea. La función es lo más importante que debería tomarse en cuenta tanto para publicidad como para construcciones de arquitectura que toman mucho la estética en el diseño pero no se debe dejar guiarse solo por lo que se ve sino por lo que es y su motivo.
